Catalina de Vivonne, marquesa de Rambouillet

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La marquesa de Rambouillet, nacida Catalina de Vivonne (Roma, 1588 – París, 1665, fue una mujer excepcional, creadora, en el siglo XVII del primer salón literario parisino en su palacio hôtel de Rambouillet, situado en París, en el lugar en el que se encuentra, actualmente, el Palacio Real.

A causa de su precaria salud, así como por las costumbres de la Corte, decidió atraer a su casa al “mundo intelectual”. Era una apasionada de las artes, la literatura, la historia… y hablaba varios idiomas.

Mantuvo un salón de mucho éxito con la ayuda de su hija Julia (1607-1671, (en cuyo honor se compuso La guirnalda de Julia), hasta que ésta se casó, en 1645) con el duque de Montausier, y falleció Vincent Voiture en 1648.

Su salón ejerció una gran influencia en la lengua francesa así como en la literatura de su tiempo. Aunque Molière ridiculizara los modales de quienes alternaban en este salón, en su obra Las preciosas ridículas, precisamente fueron estas “preciosas” las que desempeñaron un importantísimo papel en la renovación del vocabulario francés.

Este salón fue uno de los pocos que dio preponderancia a la mujer, a diferencia de los otros salones que eran frecuentados, casi exclusivamente, por los hombres. A tal fin, Madame de Rambouillet dirigía, con gran acierto, a un grupo de mujeres jóvenes, todas de buena cuna, que amenizaban las reuniones con su encanto y su gracia.

Apodada Arthénice, anagrama compuesto por Malherbe, está representada por el personaje de Cléomire en la obra Artaméne ou le Grand Cyrus, escrita por Madeleine y Georges de Scudéry. Cyrus es Enghien, personaje que representa al Gran Condé.

Entre las personas que frecuentaban el salón Rambouillet cabe citar a: