Little Sisters of Eluria
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Las Hermanitas de Eluria (título original: The Little Sisters of Eluria) es un relato de Stephen King perteneciente a su saga de siete libros La Torre Oscura. Fue publicado originalmente en el libro de relatos "Legends" editado por Robert Silverberg, y posteriormente incluido en la antología de relatos "Todo es Eventual" (del inglés "Everything's Eventual") del propio autor.
Los hechos que se narran en este relato son anteriores al primer libro de la saga "La torre oscura I: La hierba del diablo".
[editar] Argumento
Roland, ya en persecución de Walter, el hombre de negro, a quien dará caza al final del primer volumen de la saga, se detiene en Eluria, un pueblo que ha sido devastado y en el que tan sólo encuentra un perro con una curiosa marca en forma de cruz en su piel, un cadáver en proceso de descomposición y un grupo de mutantes con los que batalla y que terminan dejándole inconsciente. Cuando despierta, Roland se encuentra, inmóvil, en el interior de un inmenso pabellón-hospital del que se hacen cargo extrañas enfermeras o monjas, en realidad, vampiros que se alimentan de sus víctimas una vez éstas han sanado y recuperado su vitalidad – los “doctores” son una especie de insectos que las hermanitas controlan. Le acompaña al pistolero un joven que resulta ser hermano del muerto que Roland encontrase a su llegada al pueblo. Jenna, una de las hermanitas, revela al pistolero que su unión al resto fue involuntaria y consecuencia de la desesperación, e intenta ayudarle suministrándole hierbas para paliar los efectos de la poción adormecedora que las demás hermanitas echan en su comida y así poder escapar. Las hermanitas traen a uno de los mutantes al pabellón para que quite al pistolero un medallón cuyo poder les impide alimentarse de él, sin embargo, el mutante acaba con la vida del muchacho junto a Roland y de él se alimentan las hermanas. Roland y Jenna escapan. La hermana Mary, líder del grupo, los alcanza, pero muere cuando el perro con la marca de la cruz que Roland viese al principio se cruza en su camino. Roland y Jenna, enamorados, prosiguen su camino, sin embargo, Jenna desaparece mientras el pistolero duerme, y éste continúa su búsqueda, solo otra vez.
