Politeísmo
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El politeísmo es toda aquella doctrina religiosa en que se cree en la existencia de múltiples dios o divnidades organizadas en una jerarquía o panteón. No se refiere a una diferencia de nomenclatura –los distintos nombres de una deidad- sino que se trata de distintos dioses con características individuales identificables. En el politeismo cada deidad puede ser honrada e invocada de manera individual dependiendo de los aspectos que se le atribuyan. Dentro del politeismo existe también el henoteísmo, dentro del cual una deidad ocupa un lugar de preemiencia y honra por encima de las demás. Una ejemplo tipico de religión politeísta es el hinduismo. Ejemplos historicos son la religión y mitología griega y romana. Ver también panteísmo.
En las sociedades politeístas no suele existir un teología propiamente dicha, pero suelen convivir con sistemas filosóficos y éticos bastante complejos. Cada fuerza sobrenatural (como el rayo, la muerte o el embarazo) atiende a unos mecanismos establecidos, que conforman un complejo orden cósmico muy jerarquizado, descrito mediante mitos, leyendas y obras sagradas. En el politeísmo, debido a un entramado muy consolidado de transmisión, oral o escrita, el conocimiento es acumulativo, es decir, es perfectamente ampliado bien por la especulación de los individuos dedicados a ello (chamanes, brujos, poetas, etc.) o por el contacto intercultural.
Se suele señalar que el politeísmo corresponde a menudo con sociedades igualmente jerarquizadas, con una gran demarcación en clases sociales. Ejemplos habituales se darían en el antiguo Egipto, en la cultura clásica griega y romana o en el hinduismo. Algunas creencias politeístas sitúan además la preeminencia de un dios sobre el resto del panteón (culto conocido como henoteísmo), lo que hizo creer a los antropólogos evolucionistas que éste sería el paso natural al monoteísmo.
El politeísmo está considerado por los antropólogos evolucionistas como una forma bastante avanzada de religiosidad (propia de un cierto nivel de civilización), en la que las fuerzas de la naturaleza son discriminadas, separadas y seleccionadas, y, finalmente, representadas por una serie de dioses antropomórficos.