Tierras raras
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Las tierras raras se componen de mezcla de óxidos e hidróxidos de los elementos del bloque "f" (lantano a lutecio) además de escandio e itrio. Estos elementos tienen radios iónicos muy parecidos y muestran comportamientos químicos igualmente parecidos que hace difícil su separación. El principal estado de oxidación suele ser +3.
Aunque el nombre de "tierras raras" podría llevar a la conclusión que se trata de elementos con escasa abundancia en la corteza terrestre, esto no es así. Algunos elementos, como el cerio, el itrio y el neodimio son más abundantes que el plomo, y el tulio (el más escaso) es aún más abundante que el oro o el platino. El término "rara" surgió porque a principios del siglo XX, ante la dificultad de separar los elementos constituyentes de los minerales, estos eran raramente utilizados para algo.
La parte "tierra" en el nombre es una antigua denominación para los óxidos.
Los principales minerales de las tierras raras son bastnasita, didimio, monazita y loparita.
[editar] Aplicaciones
Los elementos de este grupo se utilizan para fabricar imanes permanentes fuertes (p. ej. samario-cobalto o neodimio-hierro-boro), materiales superconductores, láseres etc.
El cerio también se encuentra en la aleación que produce las chispas en los encendedores mecánicos y en los catalizadores del proceso Haber-Bosch de la síntesis del amoníaco.
Actualmente se están investigando aplicaciones en síntesis orgánica de compuestos organometálicos de estos elementos.
En resonancia magnética nuclear se utilizan compuestos, por ejemplo del lantano, como aditivos para separar señales de compuestos que de otra forma se detectarían juntos.