Cuerámaro

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Cuerámaro es uno de los 46 municipios del estado de Guanajuato.

[editar] Geografía

El municipio de Cuerámaro se localiza en el ángulo sudoeste del estado de Guanajuato. Se asienta sobre las amplias llanuras del Bajío guanajuatense, pero también parcialmente en la subprovincia de los Altos de Jalisco, que empieza en la sierra de Pénjamo. Su cabecera municipal es la ciudad de Cuerámaro.

Limita al norte con los municipios de Manuel Doblado, Romita y Abasolo; al este con el de Abasolo; al sur con el de Pénjamo y al oeste con el de Manuel Doblado.

El área que ocupa el territorio municipal es de 243.5 km2, representando el 0.8% de la superficie total del Estado, y el 3.6% de la subregión. La altura promedio sobre el nivel del mar es de 1,720 metros.

El municipio se divide en 48 localidades.

[editar] Historia

(Basado en el libro ...desde los muros de una hacienda: Cuerámaro, de Horacio Olmedo Canchola, México: Fundación Casa de la Cruz, 2002)

Antes de la llegada de los españoles, el territorio del actual municipio de Cuerámaro fue ocupado por los chichimecas (guamares y guachichiles) y por los michoacanos o tarascos. De estos últimos recibió el nombre de Cuerámaro, topónimo que acepta dos acepciones: "Lugar de ocotes" y "Lugar de defensa". La ruinas arqueológicas consideradas asiento del primitivo Cuerámaro se localizan al norponiente de la población, en el sitio conocido como "Los Chiqueritos".

La región cueramarense ya se encontraba desocupada a la llegada de los españoles. La conquista y ocupación por parte de éstos comenzó a principios de 1530, con la incursión de Nuño de Guzmán por el sur del actual estado de Guanajuato, y se consolidó con el establecimiento de las haciendas del capitán Juan de Villaseñor Orozco en Cuerámaro, Tupátaro y el Saucillo, y la de San Gregorio, de Alonso Rangel.

La Hacienda de San Francisco Cuerámaro, que dio origen a la actual ciudad cabecera, fue establecida por el capitán Juan de Villaseñor Orozco según la merced de fecha 5 de enero de 1543, que le fue otorgada por el virrey don Antonio de Mendoza. Esta hacienda permaneció como tal durante más de tres siglos, en poder de diversos dueños que sucesivamente la fueron adquiriendo por herencia o remate. En 1762 fue adquirida por la comunidad de la Sagrada Religión de Clérigos Regulares Ministros de los Agonizantes de San Camilo de Lelis, conocida como de los padres camilos, quien la mantuvo en su poder hasta 1858, cuando tuvo que ser vendida por efecto de la Ley Lerdo, que obligó a la desamortización de los bienes de las comunidades religiosas y civiles. La hacienda fue adquirida entonces por el licenciado don Agapito de Anda, quien de acuerdo con el espíritu de la Ley Lerdo y de las Leyes de Reforma, fraccionó el territorio cueramarense y fundó la Congregación de Cuerámaro.

El municipio de Cuerámaro se estableció según el Decreto número 6, expedido el 12 de noviembre de 1869 por el gobernador del Estado, Florencio Antillón, abarcando el territorio que tenía la hacienda de Cuerámaro, la de Tupátaro y la de San Gregorio. Al mismo tiempo, la Congregación de Cuerámaro fue elevada al rango de pueblo y cabecera municipal, con el nombre oficial de Cuerámaro de Degollado. Cien años después, siendo presidente municipal don José Vicente Canchola, el pueblo de Cuerámaro fue elevado a la categoría política de Ciudad, según el Decreto Número 132, expedido por Manuel M. Moreno, gobernador del Estado.