Luisa Roldán
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Luisa Ignacia Roldán Villavicencio conocida popularmente como La Roldana, nace en Sevilla en 1656 y fallece en 1704. Es una de las principales figuras de la escultura del Barroco en la Andalucía de finales del siglo XVII y principios del XVIII.
Hija del prestigioso escultor Pedro Roldán, logró fama en su época, y vivió una agitada y desgraciada existencia que ha aumentado su leyenda. Se casa en contra de la voluntad paterna con el mediocre escultor Luis Antonio de los Arcos en la Navidad de 1671. En 1686 marcha a Cádiz para realizar diversos trabajos; en 1688-89 viaja a Madrid, en donde trabajará como escultora de cámara para los monarcas Carlos II y Felipe V.
A pesar de su fama, nunca disfrutó de fortuna económica y muere en la pobreza en 1704. Tuvo seis hijos de los que sólo sobrevivieron dos; su trabajo sustentaba a toda la familia, pues su marido sólo se dedicaba a pintar sus tallas.
Su obra, muy abundante y de carácter principalmente religioso, se distribuye sobre todo por Andalucía Occidental: Sevilla (Esperanza Macarena), Salteras, Sanlúcar la Mayor, Cádiz (destacan las tallas de los patronos San Servando y San Germán, la desaparecida María Magdalena quemada en 1936, y el Ecce-Homo), Sanlúcar de Barrameda, Jerez de la Frontera (Dolorosa de los Remedios), Puerto Real (Virgen de la Soledad), Carmona, Córdoba (Ecce-Homo)... pero también fuera de Andalucía: Sisante (Cuenca), Madrid.
