Montjuic (Barcelona)
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La montaña de Montjuic (Montjuïc en catalán; a veces escrito en castellano también como Montjuich, según la ortografía catalana anterior a Pompeu Fabra), es un promontorio situado en el suroeste de la ciudad de Barcelona, desde donde se dominaba el puerto y la zona antigua de la ciudad. El nombre significa Colina de los Judíos en catalán medieval o quizá una corrupción del latín Mons Jovicus (esto es Colina de Júpiter).
[editar] Geografía
- Latitud: 41º 22' N
- Longitud: 002º 10' E
[editar] Historia
Se han encontrado los restos de un poblado ibérico del siglo III adC y siglo II adC.
Siempre ha sido un lugar estratégico desde el cual defender la ciudad por lo que desde antiguo ha habido fortalezas en su cima. En 1751 se construyó el actual castillo, obra de Juan Martín Cermeño, que durante la Guerra de la Independencia Española fue ocupado por los franceses.
Al igual que ha sido un punto estratégico para la defensa de la ciudad, lo ha sido para mantenerla bajo control, junto con la fortaleza de la Ciutadella en el otro extremo de la ciudad. En el año 1843 se bombardeó la ciudad desde el castillo para poner fin a la rebelión de la jamancia lo que destruyó o dañó 460 edificios.
El castillo también ha sido utilizado numerosas veces como prisión para presos políticos hasta los tiempos de la dictadura de Franco, y lugar donde posteriormente eran fusilados y enterrados en el cementerio del lado sur-oeste de la montaña. Durante el siglo XIX se fusilaron varios anarquistas y en 1940 a Lluís Companys presidente de la Generalitat de Catalunya.
En 1928 fue el sitio elegido para dar lugar a la Exposición Universal, motivo por el cual se construirían los diferentes pabellones que se alzan por las faldas de la montaña y a ambos lados del paseo que lo conduce desde la Plaza España, en el Barrio de Sants-Montjuic, y desde donde se pueden disfrutar unas grandes vistas.
[editar] Actualidad
En la actualidad, se encuentra íntimamente relacionada con el deporte, debido a la gran cantidad de instalaciones deportivas que acoge.
En la falda de este monte se encuentran las instalaciones olímpicas que acogieron los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, como el Estadio Olímpico Lluis Companys (en cuyo recinto se encuentra el Museo de la Fundació Barcelona Olímpica), el Palau Sant Jordi diseñado por el arquitecto japonés Arata Isozaki, la Piscina de Saltos y las Piscinas Picornell, y el antiguo Palacio de los Deportes de la calle Lérida, ahora reconvertido el el Barcelona Teatre Musical, que acoje espectáculos teatrales y musicales. La oferta de instalaciones deportivas la completan el estadio de atletismo Joan Serrahima, y el las instalaciones del Instituto Nacional de Educación Física de Cataluña (INEF Cataluña).
En Montjuic se encuentran también lugares de interés turístico como el Poble Espanyol, un recinto que simula un antiguo pueblo español, con sus plazas y estrechas callejuelas, y que está poblado de restaurantes, bares, y lugares de ocio y espectáculo, además el torre de telecomunicaciones diseñado por Santiago Calatrava. Antiguamente Montjuic también acogió un famoso parque de atracciones, ahora convertido en el jardín público Joan Brossa.
La montaña es sede también de importantes instituciones culturales. Además del mencionado Barcelona Teatre Musical, se encuentran aquí también el Teatre Lliure, el Mercat de les Flors, el Teatre Grec, el Museo Joan Miró, el Museo CaixaFòrum, el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC), así como el Jardín Botánico Histórico, que dispone de una colección única de cactus, y el nuevo Jardín Botánico de Barcelona especializado en la flora de las zonas mediterráneas del mundo.
En la Avenida María Cristina, entrada principal a la montaña de Montjuic desde la Plaza de España, se encuentran los pabellones de la Fira Barcelona, construidos con motivo de la Exposición Universal de 1929, y que organiza algunos de los salones, muestras y exposiciones más importantes de España. Frente a los pabellones de la Fira se encuentran las famosas Fuentes de Montjuïc, que diversos días de la semana muestran un espectáculo de luz y color.
Por último, es también un lugar ideal para el descanso y el paseo, debido a las grandes extensiones de jardines, y las espectaculares vistas que ofrece de la ciudad de Barcelona.
